No son pocos los que toman los mundiales de fútbol como una referencia temporal para fijar ciertos hitos personales.  
Cada cuatro años, ese corte arbitrario permite orientar hacia atrás el GPS emocional, y repasar alegrías y tristezas que tuvieron el marco de una de las competencias deportivas más apasionantes. 
De esto pueden dar fe aquellos que aun aclarando, como si hiciera falta, que no les gusta el fútbol, durante ese mes fuera de lo común no pueden evitar caer bajo el influjo festivo de un juego que claramente es mucho más que eso.
Dentro de esas 22 camisetas que salen a la cancha van 22 soldados que representan a sus respectivos países en una suerte de batalla que, en esta ocasión, se inspira en la gloria deportiva  a conseguir y no en la conquista territorial.
Es por este clima que sólo puede lograr la pasión por el fútbol que a la hora de pensar de qué manera queríamos festejar nuestro 21º aniversario, no lo dudamos. 
Dijimos: “Estamos en junio, mes del Mundial y de Diario UNO, por qué no recordamos cómo vivimos en nuestras páginas cada uno de esos campeonatos”.
Así fue como pusimos la lupa en Estados Unidos (1994), Francia (1998), Corea del Sur y Japón (2002), Alemania (2006), Sudáfrica (2010) y Brasil, el que nos atrapa por estos días.
Aunque para muchos se trate de un mes en el que no ocurre otra cosa que esos 64 partidos, sus goles, sus estrellas y sus curiosidades, el mundo sigue girando fuera de los estadios. 
Por eso, en esta vuelta de página también repasamos qué pasaba en la otra cancha, la de la siempre generosa “realidad”.  Qué hechos quedaban eclipsados por el Mundial de entonces o, al contrario, cuál lograba –aunque fuera por un rato– que no se hablara del gol del día o ese partidazo que se analizaba al detalle en las mesas del café.
Como en cada aniversario de UNO, renovamos el compromiso con nuestros lectores de seguir jugando en el mismo equipo, defendiendo día a día la camiseta de Mendoza. 
Dentro de cuatro años, es decir para el Mundial de Rusia, no cumpliremos un aniversario más. Serán nuestras Bodas de Plata. Un festejo que, no dudamos, será lo más parecido a salir campeones o gritar el mejor gol.

(Suplemento 21 aniversario de Diario UNO, 27 de junio de 2014)